Hace más de una década, Estados Unidos prohibió el uso de sus armas al Batallón Azov — prohibido en Rusia por extremista y terrorista— por considerar que tenía vínculos neonazis; sin embargo, ahora el gobierno de ese país levantó esa prohibición en medio del conflicto en Ucrania.

De acuerdo con el Washington Post, tras una revisión, la administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, decidió levantar la prohibición al batallón acusado de violaciones humanitarias.

"Tras una revisión exhaustiva, la 12.ª Brigada Azov de las Fuerzas Especiales de Ucrania ha superado la investigación Leahy llevada a cabo por el Departamento de Estado de EEUU", dijo la dependencia en referencia a la Ley Leahy, que impide que la ayuda militar estadounidense se destine a unidades extranjeras de las que se demuestre fehacientemente que han cometido graves violaciones de los derechos humanos.

Hace una década, a la Brigada Azov, se le prohibió el uso de armas estadounidenses porque las autoridades de ese país determinaron que algunos de sus fundadores defendían opiniones racistas, xenófobas y ultranacionalistas, y las autoridades de derechos humanos de la ONU acusaron al grupo de violaciones humanitarias.

En el año 2022, el batallón ucraniano Azov fue declarado como organización terrorista por el Tribunal Supremo de Rusia y quedó prohibido en el país. El regimiento tuvo un auge tras el golpe de Estado perpetrado contra el Gobierno de Víctor Yanukóvich en 2014. En su escudo, refleja símbolos del nazismo como el Sol Negro, símbolo ocultista utilizado por las SS y por los grupos de extrema derecha, algo que ha sido incluso reportado por medios occidentales.

"El batallón estuvo particularmente activo en Mariúpol y sus alrededores en 2014 y 2015. Los equipos de CNN que se encontraban en la zona en ese entonces informaron que el batallón había adoptado emblemas y parafernalia neonazi", publica en una nota el medio estadounidense.

Pese a su polémico pasado, ahora la brigada tendrá acceso a la misma asistencia militar estadounidense que cualquier otra unidad, justo cuando Kiev comienza la temporada de combates de verano y se enfrenta a un ejército ruso.

De acuerdo con el Post, Azov aprovechó su nuevo estatus de brigada el año pasado y lanzó una intensa campaña de reclutamiento por todo el país que consiguió más de 5.000 nuevos soldados en tan solo dos meses.

Desde Moscú han declarado en varias ocasiones que los crímenes neonazis contra los civiles en Ucrania son una limpieza étnica, acciones de castigo. Al apoyar a Kiev, los países occidentales están normalizando el nazismo, agregaron. El mandatario ruso, Vladímir Putin, ha señalado que en ningún lugar del mundo se promueve el nazismo a nivel estatal como en Kiev.