Las televisiones locales de Irán informaron a primera hora de este domingo el
accidente de uno de los helicópteros del convoy en el que viajaba el
presidente iraní, Ebrahim Raisi. Dentro de este séquito, había tres helicópteros y
se desconoce si el siniestrado era el que trasladaba a Raisi. El accidente tuvo lugar en
Azerbaiyán, lugar en el que el líder iraní se encontraba reunido con
Ilham Aliyev,
mandatario azerbaiyano, para inaugurar la
presa Qiz Qalasi, construida conjuntamente en el río Aras.
Según las últimas informaciones distribuidas por Reuters, fuentes gubernamentales explicaron: "Mantenemos la esperanza, pero la información que llega desde el lugar del accidente es muy preocupante". Estas mismas fuentes señalan que la vida del presidente Raisi y del
ministro de Exteriores, Amirabdollahian (quien viajaba también en la aeronave siniestrada) "están en peligro tras el accidente de helicóptero".
Ebrahim Raisi es
presidente de la República Islámica de Irán desde el
5 de agosto de 2021. El político, nacido en el seno de una familia de clérigos persas en el año 1960, se presentó como candidato a la presidencia de su país en el año
2017. Su candidatura por el
Frente Popular de las Fuerzas de la Revolución Islámica, un partido de corte conservador, fracasó en los comicios de ese año, pero sí consiguió la victoria en 2021. Su figura se sitúa por debajo de la del
gran ayatolá Sayed Ali Jamenei, principal autoridad política iraní que mantiene su cargo desde 1989. De hecho, Raisi se refiere a sí mismo como
hoyatoleslam, un título clerical más bajo que el ayatolá en estatus y privilegios.
Esta jerarquía de poder hace que sus capacidades están relativamente limitadas, especialmente si se trata de seguridad nacional. Por ejemplo, el
Ministerio de Interior sí queda bajo el control del presidente pero, en lo formal, está gestionado por el llamado
Cuerpo de la Guardia Revolucionaria, por lo que Raisi no tiene poder en este ámbito. Además, el poder ejecutivo para aprobar o derogar leyes reside en manos del
Consejo de Guardianes, órgano que también tiene un radio de acción mayor que el del mandatario iraní.
Antes de ocupar este cargo, el político había desempeñado otras funciones dentro del sistema judicial de su país. De hecho, Raisi comenzó su carrera judicial con solo 20 años en el sistema judicial islámico recién establecido. Fue en la década de los 80 y los 90 cuando ejerció como
fiscal adjunto de Teherán. Años más tarde, ya en la década de los 2000, ocupó el puesto de vicepresidente de la Corte Suprema entre 2004 y 2016, fue
Fiscal General entre 2014 y 2016 y ejerció como presidente de la
Corte Suprema de su país entre el año 2019 y el 2021.
Con información de Agencias