"Venezuela es un país fácil de sancionar porque tenemos petróleo (...) Como somos un sector petrolero tú sancionas no permitiéndole vender petróleo en occidente, en este caso en su mercado natural que es Estados Unidos y colocando trabas en Europa para que no lo vendan y no puedas cobrar, esto genera el gran inconveniente de flujo de caja para el gobierno y el país", explica el experto.

Para Oliveros es sumamente crucial que Venezuela logre un mayor ingreso por la vía del sector petrolero, "que más empresas trabajen aquí, que se mueva el mercado laboral desde el punto de vista petrolero, aunque no sea con mucha gente, pero eso permee en otras áreas de la economía y automáticamente te genera crecimiento económico", agrega.

"Con sanciones eso es imposible", insiste. "Venezuela en este momento tiene una posibilidad de vender petróleo al mercado asiático, a China, pero China como tiene un riesgo de comprar petróleo a un país sancionado entonces nos colocan una disminución de precios importante, y con el conflicto de Rusia y Ucrania mucho peor para nosotros, tenemos un mayor competidor que es Rusia en el mercado asiático, se habla entre 40% y 45% la disminución de precios para el crudo venezolano en China", indica.

"Venezuela con las sanciones no pudo refinanciar deudas, no pudo atraer capital, no pudo comprar materia prima, una situación muy complicada. Ahora bien, los problemas de Pdvsa no empezaron con las sanciones, había un colapso ya pero las sanciones fueron una 'bomba' para Pdvsa y nuestro parque refinador, las sanciones no han funcionado en Irán, Cuba, Yemen. Yo creo que hay un tema de terquedad, de lobby económico y político importante, hay países que se han beneficiado de las sanciones a Venezuela, es obvio quienes son, hay gente que vive de este estatus quo de las sanciones", alerta Oliveros.

Se preguntó: "¿Por qué insistir en un modelo fracasado? (...) Yo le decía a algunos amigos de la oposición que están de acuerdo con las sanciones si es que ellos son 'maduristas', porque al final con las sanciones se olvidó hasta que Venezuela hablara de la deuda externa y 60 mil millones de dólares dejaron de ser un problema.
No puede pagar ni reestructurar la deuda externa".

Oliveros relata que, en conversaciones con el llamado interinato, recomendó cambiar la estrategia. "No tiene sentido hacer lo mismo y esperar resultados diferentes cuando has fracasado de manera estruendosa, y muchos se lo dijimos, hay una especie de cuento de sacrificio que tenemos que hacer los que vivimos aquí, los que están afuera no saben cómo es vivir en un país sancionado".

"Yo considero que parte de la oposición se convirtió en 'sanción dependiente', en 'OFAC dependiente'. Se olvidaron de hacer política, y se quedaron en esperar que otro les resolvuera el problema (...) hoy están en el limbo, la comunidad internacional desde hace 3 años cambió, hasta Colombia ya tiene un amigo presidente y es (Nicolas) Maduro (...) El motor de Venezuela siempre ha sido el petróleo, pero no hemos sabido utilizar esa palanca para el desarrollo, el problema aquí no es el petróleo, es el manejo de los recursos proveniente de la venta de petróleo. Nosotros recibimos ingresos por petróleo y pudimos haber construido un país energético como el caso de Australia".

En opinión de Oliveros y pese a los negativos escenarios, "Venezuela tiene mucho por hacer en materia energética, el petróleo no se va a acabar mañana y le quedan muchas décadas, pensemos en ese palanca para el desarrollo. Estamos produciendo 700 mil barriles diarios y que podamos llegar al 1 millón es nada en comparación con 3 millones de barriles de antes, pero estás aumentando en casi un 50% la producción", sostuvo.

Dice que hoy, aunque a algunos no les guste admitirlo, el principal problema de la industria petrolera es ese, las sanciones. Oliveros afirma que ciertamente el Gobierno se tardó en tomar decisiones desde el punto de vista económico muy importantes, pero ve con buenos ojos que en los últimos 5 años se haya dado un giro más pragmático frente al abordaje de la crisis financiera de Venezuela.

"Yo pongo el ejemplo del aumento de los salarios, hasta hace unos años eran prácticamente mensuales, ahora el gobierno no aumenta los salarios, aumenta los impuestos, hay un tema de objeción fiscal, aunque seguimos teniendo déficit fiscal este fue un gobierno que en cuestión de dos o tres años llevó el tamaño del Estado de 50 puntos del PIB a 15 puntos, pero el pragmatismo y el entendimiento de que las cosas tenían que cambiar yo creo que esa fue la primera prueba de esto".

Continúa: "Lo otro es luchar para que la tasa de cambio se mantenga estable, tal vez no tengas todas las herramientas pero tratas de hacerlo para que se mantenga estable porque saben que tiene un patrón directo con la inflación", expone.

Oliveros resaltó que el equipo económico de Maduro esté liderado ahora mismo por la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez y con asesores económicos ecuatorianos. "Yo no creo que vayan a echar para atrás luego de un camino andado, y soy muy crítico de las cosas que han hecho, creo que el ajuste cambiario debieron hacerlo de otra manera igual que el fiscal, pero el pragmatismo para mi ha sido positivo, hay rumores de que salgan los ecuatorianos pero yo prefiero que se queden, son economistas que tienen excelente curriculum y ciertamente han inyectado una dosis de sensatez y pragmatismo a las decisiones económicas", señaló Oliveros.

Finalmente, Oliveros recalcó que Venezuela necesita mayores ingresos, "ha reducido el gasto pero tiene un problema de generación de ingresos y el problema de generación de ingresos está en el tema petrolero, es urgente recuperar la industria petrolera".

A su juicio, es clave que pueda tener participación empresas con ENI y Repsol, igual que le den más licencias a Chevron para que pueda conseguir un techo de seguir subiendo la producción, "pasó de 45 mil barriles diarios a 125 mil, hay un incremento importante pero necesitamos una Chevron de 300 y 400 mil barriles diarios, igual que Eni, Repsol y otras petroleras occidentales".

Se muestra esperanzador, Oliveros cree que Venezuela este 2023 registre un crecimiento económico "a pesar de esa ralentización que estamos teniendo". "Podemos estar creciendo un 4% si solamente está Chevron, para todo lo que hemos perdido es una mala noticia, pero si está ENI, Repsol y otras empresas, yo creo que no será descabellado pensar en un crecimiento de dos cifras para este año, aunque esto no podemos superarlo con sanciones".