Basta con echar la vista atrás para darnos cuenta de que, en las últimas décadas, la industria del juego ha cambiado de forma notable. Y es que, si pudiésemos hacer un viaje al pasado y hablar con los habitantes del mundo de mediados del siglo XX, probablemente ninguno sería capaz de imaginar cómo ha evolucionado.
El papel, primer vehículo para jugar
Hace mucho tiempo que la prensa escrita empezó a incorporar en una de sus páginas (habitualmente, en la contraportada) algunos pasatiempos. Sobre todo, crucigramas que ponían a prueba la capacidad del lector para encontrar palabras según sus definiciones y entrecruzarlas hasta rellenar todas las casillas del cuadro. Hoy en día, sigue siendo posible encontrarlos en estos medios, si bien es cierto que cada vez son menos los diarios que siguen publicando en papel.
Aquí se refleja un salto evidente. Actualmente, ya no hace falta esperar a que salga el periódico del día siguiente para tener un nuevo crucigrama o sopa de letras para realizar. Basta con entrar en Internet o descargar una aplicación móvil para tener a nuestra disposición cientos de ellos, por no decir miles. Incluso es posible elegir el grado de dificultad de cada uno.
Esto también se puede aplicar a otros juegos típicos de los periódicos, como es el caso de los problemas de ajedrez. Las aplicaciones móviles especializadas en este juego han proliferado notablemente durante los últimos años, de modo que cualquiera puede evolucionar en sus conocimientos en torno a él de manera mucho más cómoda y sencilla.
El mundo digital ha abierto un gran abanico de posibilidades
Sin embargo, los típicos juegos que encontrábamos en los periódicos no son los únicos que han dado el salto al universo online. Solo hay que pensar en los casinos. Antes, para echar una partida de
blackjack era necesario acudir a un salón de juego o a un casino físico, lo que exigía cierta planificación. En estos momentos, podemos aprovechar cualquier rato libre que tengamos para disfrutar de un agradable rato jugando al mítico 21.
Lo mismo podemos decir respecto a la ruleta, el baccarat, el póker o cualquier otro juego clásico de los casinos. Hasta de las máquinas tragamonedas. Sin duda, la industria de los casinos ha sabido aprovechar a la perfección las ventajas ofrecidas por el mundo digital. Eso sí, este conjunto de innovaciones también ha afectado a otros muchos juegos de mesa en los que el azar no es el protagonista. De hecho, encontrarse en lugares diferentes del mundo no es un impedimento para que un grupo de amigos disfrute de una partida al Trivial Pursuit o al Palabras Cruzadas.
En definitiva, la evolución del juego a lo largo de las últimas décadas ha venido marcada, fundamentalmente, por la irrupción y la expansión de Internet en todo el planeta. Una tecnología que, vista en retrospectiva, fue absolutamente revolucionaria, ya que cambió por completo la forma en la que vivimos. No solo en lo que respecta a la comunicación y al trabajo, sino también al ocio.
